EL 85% DE LA CIUDAD DE PETRA AÚN ESTÁ SIN EXPLORAR

Que misterios aguardan bajo esta montaña?



Petra, la ciudad prehistórica jordana excavada sobre las paredes de arenisca de un acantilado de color rojo, blanco y rosa, fue una «ciudad perdida» para occidente durante cientos de años.

Localizada entre escarpados cañones y montañas desérticas en lo que es actualmente el extremo suroeste del Reino Hachemita de Jordania, la ciudad de Petra fue en su día un próspero centro de comercio y la capital del imperio nabateo entre el 400 a.C. y el 106 d.C.

La ciudad permaneció vacía y en un estado casi ruinoso durante siglos. A principios del siglo XIX, un viajero europeo se disfrazó de beduino y se infiltró en el misterioso emplazamiento.

En1985, el Parque Arqueológico de Petra fue declarado un lugar Patrimonio Mundial de la UNESCOy en 2007 fue declarado como una de las nuevas siete maravillas del mundo.

Realidad y ficción

Varias escenas del éxito de Hollywood Indiana Jones y la última cruzada se filmaron en Petra. El cañón ficticio que aparece en la película, el cañón de la Luna Creciente, sediseñó en la entrada este de Petra, un cañón de ranura de arenisca con una altura de 76 metros conocido como el Siq que lleva directamente a Al Khazneh («el Tesoro»), probablemente el más impresionante entre todos los sobrecogedores monumentos de Petra.

En las climáticas escenas finales de la película, los actores Harrison Ford y Sean Connery aparecen precipitadamente por el Siq y se adentran en las profundidades del laberinto del Tesoro en su búsqueda del Santo Grial. Sin embargo, como suele ocurrir, los hechos arqueológicos han sido moldeados para encajar en la ficción de Hollywood cuando Indi llegó a Petra.

En realidad, el Tesoro es simplemente una fachada con un vestíbulo relativamente pequeño que en su día se utilizó como tumba real.

«No se puede afirmar que nada en Indiana Jones sea preciso», explicó el arqueólogo de la Universidad de Haifa, Ronny Reich. «Una vez, en Estados Unidos, me preguntaron si una de las responsabilidades de los arqueólogos israelíes era perseguir a los nazis. Y les dije ‘no, ya no’».

Una urna gigante excavada sobre la entrada del Tesoro conserva las marcas de cientos de disparos. Las tribus beduinas que viven en las antiguas ruinas afirman que el daño fue provocado cuando los hombres locales abrían fuego con rifles, en busca del botín que pensaban que se escondía dentro de la urna (pero está hecha de piedra sólida).

Hay docenas de tumbas y otras estructuras y yacimientos excavados o construidos dentro de Petra.

Historia

Los nabateos, antes de ser conquistados y absorbidos por el Imperio romano, controlaban una vasta extensión de Oriente Medio, desde Jordania y el actual Israel hasta el norte de la península arábiga. Los restos de sus innovadores mecanismos para capturar, almacenar y transportar el agua, así como sus sistemas de irrigación todavía pueden encontrarse en la actualidad en toda esta zona.

Los expertos saben que los nabateos habitaron Petra desde al menos el 312 a.C., según el arqueólogo Zeidoun Al-Muheisen de la Universidad jordana de Yarmouk.

Al-Muheisen, que ha realizado excavaciones en Petra desde 1979 y es especialista en el periodo nabateo, dice que nadie ha encontrado todavía ninguna prueba arqueológica que se remonte al siglo IV a.C. Los hallazgos más tempranos hasta ahora datan solamente de los siglos II y I a.C.

Sin embargo, hay más pruebas bajo la superficie. «Hemos descubierto solo un 15 por ciento de la ciudad», explica. «La gran mayoría —85 por ciento— todavía se encuentra bajo tierra e intacta».

En diciembre de 1993, se descubrieron numerosos pergaminos en griego que datan del periodo bizantino en una iglesia excavada cerca del Templo de los Leones Alados en Petra.

En la actualidad, los investigadores en el Centro Americano de Investigación Oriental en Amán, la capital, están analizando estos pergaminos y esperan que arrojen algo de luz sobre la vida en Petra durante este periodo.

Una vez Roma tomó formalmente posesión de Petra en el año 106 d.C., su importancia en el comercio internacional empezó a desvanecerse. La decadencia de la ciudad se prolongó, algo a lo que contribuyeron los terremotos y la mayor importancia que cobraron las rutas comerciales marítimas, y Petra alcanzó su nadir (punto más bajo) prácticamente al final del Imperio Bizantino, hacia el 700 d.C.

Los visitantes en la actualidad pueden ver mezclas diversas de estilos arquitectónicos nabateos y grecorromanos en las tumbas de la ciudad, muchas de las cuales fueron expoliadas por ladrones, motivo por el cual se han perdido sus tesoros.

Actualmente, los beduinos del lugar venden suvenires turísticos no muy lejos del lugar donde los árabes creen que Moisés rompió una roca con su cayado, haciendo que las aguas se separasen.